8.10.08

Yo entiendo al pobre Güemes

Viendo El País de ayer y varios blogs que comentaban las visitas de Güemes a los hospitales (no les pongo adjetivo porque, de verdad, no sé cuál ponerle) de la Comunidad de Madrid, yo creo que la gente se está cebando con el pobre Güemes. Por dos razones.
La primera, porque los sindicatos deberían estarles agradecidos. La gente lleva años diciendo que no hacen absolutamente nada pero ahora, gracias a los vídeos que ha mandado la Comunidad pueden decir "que no, que es mentira que yo esté a mis intereses, mira estos vídeos, ¿ves cómo estamos con los trabajadores, con lo público?".
La segunda, porque a mí me pasa lo mismo. Os pongo un ejemplo. A mí el fútbol no me interesa absolutamente nada pero hay ocasiones en las que toda la familia se pone el partido que sea en la tele y ahí estamos, todos juntitos frente a la pantalla. Al final yo siempre acabo mirando, lo cual no significa que mi cerebro retenga lo que oye o ve, que mi cabeza es muy lista y sólo retiene lo que quiere. Puedo estar hora y media (o lo que sea que dure un partido) frente a la tele oyendo palabras para mí sin interés -falta, penalti, venga, venga, dale caña, gol, eso es mano árbitro, uyssss,...- pero si por ejemplo aparece de fondo una bandera republicana yo reaccionaré y diré "mira, una republicana". Si al finalizar el partido alguien me pregunta por él yo respondería "muy bien, había una bandera tricolor". Pues eso mismo le pasa a Güemes que, como yo, es un incomprendido. A él la salud de la ciudadanía de Madrid le importa lo mismo que a mí un Hércules- Eibar (si es que esos equipos existen, que me la suda). Este hombre podrá pasearse por un hospital y oír igualmente palabras para él sin interés -quirófanos inoperativos, pacientes hacinados en pasillos, falta de material, fallos del sistema informático, personal subcontratado,...- y seguirá andando como quien oye llover (y esto una metáfora sobre goteras en hospitales). Pero va caminando y de repente escucha algo que sí es de su interés - pantalla de plasma-. Ahí reacciona. Y por eso hace las declaraciones que hace.
Bueno, hay que reconocer que una diferencia sí que existe en este ejemplo. Yo no soy responsable de nada que tenga que ver con el fútbol. Vale que nadie me lo ha pedido, pero si lo hubieran hecho, hubiera rechazado esa responsabilidad, por decencia y porque sé que no lo haría bien, básicamente porque no me importaría. A Güemes sí se lo pidieron (¿o se lo pidieron a su suegro?). Ahí está lo que respondió.

3 comentarios :

RGAlmazán dijo...

¡Que capacidad de compresión la tuya! ¡Mira que comprender al pobre Güemes!

Salud y República

Curro Corrales dijo...

como aventajada psicóloga, desde luego, tienes una capacidad de empatía admirable, jeje...

Muy buena tu disertación y ese ejemplo tan humano y familiar... Lástima que Güemes dijese "Sí, quiero... gestionar la Sanidad pública madrileña".

Del temita de los vídeos y de Güemes hablo yo también en mi blog.

Un besotex, reina (republicana, of course!)

Javier dijo...

desde luego leire que lo has bordao, la pena es que el susodicho al que mencionas no leera esto por desgracia, y si lo hiciera pasaria de ello, es una lastima la verdad que no haya muchas mas personas que no vean estas cosas.