1.8.17

Hoy es día par y no suenan pájaros desde la ventana.
La alarma que no desconecté anoche
ha sonado demasiado pronto:
a la hora a la que despierto
cuando amanecemos juntos.
Tengo una hora más para dormir,
y cuando vuelva a despertar
no habrá cantos en los árboles,
ni abrazos-excusa para continuar en la cama.