5.6.11

Voy a recordarte que no soy una cobarde
y que lucho a lágrimas y dientes
por aquello que me importa.

No olvides que nací peleona
y con ansia de verdad,
que a mí no se me calla con tres gritos
o un puñetazo en la mesa.

Porque a mí lo que me sobra
es paciencia
y una sonrisa en la cara
que es lo que a ti te jode.